Mélida Berenice Betancourt Sánchez

En mi fe...

Alma, esperanza 
y alegría...
Que llenan esta
alma mía...
En mi fe,
que mi cruzifico
guarda...
confío toda 
mi dicha.
A los casi 
diez y nueve años,
de ver mirar el sol
todos los días...
Hoy no puedo distinguir
si es de noche o de día,
esta lentitud amarga
mi joven alegría...
Que fue condenada
a la muerte lenta
por unas palabra 
hirientes,
por esas miradas
ingratas...
De esos desdenes
ardientes, que aquellos
a mi arrojaban...
Hoy no se si sonrio,
y ya no me siento
llorar...
Más en mis locos
desvarios a ellos
comienzo a gritar...
Ya el frío no me cala,
ni el fuego quema 
mi piel...
Mas aún mi alma
reclama,
que él vuelva otra
vez...
Y yo, loca insensata,
ferviente en mi fe...
Solo rezo y suplico,
que la cordura 
regrese a mi ser...

Mélida Berenice Betancourt Sánchez
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