srakkin

Mi seno astronauta

En mi tierra desértica y mágica
las estrellas se pueden tocar con las manos
mientras se contempla el afirmar de los vientos,
con el placer de platicar y discutir con la tierra misma
a la orilla del loa que cada día se adelgaza más.

Se podría gozar de la guía turística espiritual
que nos obsequian esas que la gente discriminativa
llama droga, siendo sensible y hospitalaria
a la hora de alojarte, pero es que ya se tergiversó
el pasar de los tiempo con ese fruncir del alma bastante pueril.

En mi tierra ya no se valora el pasar de las horas
ni los ancestros estelares que nos aportan
desde el mismo cuero hasta el umbral de nuestra inocencia,
es que es simple, con el pasar de la vejez
la tierra se contamina y nos contamina a nosotros
¿Con el tiempo, que nos pasara?