Yo te puedo ver ahí sentada, estas triste con las palmas sobre la cara. Estas llorando y las lagrimas escurren sobre las puntas de tus dedos. Quieres algo mejor, yo lo veo yo, lo siento. Buscas amor, buscas equilibrio, buscas lo que no tienes y te provoca gritar. La esperanza desvanece y con ella sientes que tu tiempo se va. Las paredes te hablan y tu les respondes pero tus nudillos ya tienen cicatrices. Tus manos pintadas de rojo gotean desesperadamente. Con esto el amor muere y se crea la obsesión.