MARTHA ALBÁN

¡A MI DIOS.... .MI SEÑOR ...MI SANADOR..MI SALVADOR!

¡Cómo no voy a adorarte mi Dios!
si me diste la vida, si me ofreciste la convicción de tu perdón,
¡Cómo no voy a escucharte mi Señor!
si restauraste mi vida, y me llenaste de fe y esperanza.

¿Acaso hay en mi vida alguien más valioso, verdadero y misericordioso que tú mi Dios?
Pues no....solo tú eres perfecto Señor Jesús, solo tú mi Dios Omnipotente, eres el único,
Mi señor reconozco que a veces mis fuerzas se debilitan en el recurrir de mi vida,
¡Y tan solo tú no me abandonas, tan solo tú me perdonas, tan solo tú me haces recobrar
el valor a la vida que tú la ofrendaste en la cruz por nuestros pecados y desobediencias!

Tú mi Rey de Reyes, Señor de Señores, mi Cristo Redentor, aquí me tienes, a tus pies,
de rodillas suplicándote mi perdón, nuestro perdón, suplicándote que entres en mí, 
entres en nosotros, mores en mí, mores en nosotros, permanezcas en mí,
¡Y por siempre hasta el final de nuestros días en la tierra, permanezcas con nosotros.

Dios mío, llena mi corazón de perseverancia, amor, paciencia, perdón, confianza y fe,
pues te amo, te adoro, te venero, te obedeceré y acataré tu voluntad, 
respetaré nuestro pacto, un pacto que lo reconfirmo contigo, pues sé que solo así,
Siguiendo tu camino, ofrendándote mi amor, mi oración, nuestro amor, nuestras
oraciones, mi obediencia, nuestras obediencias, alcanzaremos tu perdón y así,
¡MI DIOS, PODREMOS TENER ESA VIDA ETERNA, NUEVA Y CELESTIAL A TU LADO!