Vidal jimenez

que maldito es el destino

Tantas vivencias, tantas creencias para que si 
hoy el destino me pone el ya esperado título a la idiotez

Gritaré a los cuatro vientos que te odio
haré una fogata y quemaré tus recuerdos

cada bendita lágrima que mis ojos derramaron
por estúpido y por una desgraciada como tu  te confieso que todas mis lagrimas sean convertido en dio, rencor y fracaso que saben amargo pero me aguanto las ganas de matarte!

¡Estrangularte, quemarte, hacerte polvo porque han pasado meses y todavía me duele  todo el daño que tu me isiste pero  

A tu salud reina de las mentiras  me tomo esta copa
llena de mi propia  sandre   para olvidarte
¡brava maestra de la actuación!
te felicito, nada ni nadie se compara contigo