Si adviertes el Misterio en estos Ojos
Y sientes Terror al percibir la intimidad de mí Ser,
Y eso excita tu dualidad: mujer/sagrario;
Y voces en tu cuerpo claman descarnar del Alma,
Y así saciar su vacio de Deseos;
Y fragmentas y converges,
fragmentas y converges en instantes;
Y la tensión del Ritmo en el Misterio,
Copula tus Palabras en la entraña del Recuerdo;
Y gimen en tumulto,
Y el misticismo del corazón desgaja su claustro,
Y fragmentas y converges:
Despídete de ti; pues no serás mas quien creías,
Sino ese otro que intuyes bajo el estanque del Terror.
Ve por ello y subsana hendiduras donde la luz disgrega;
Exilia tus restos en mis manos. Enciende sombras,
Despídete y atesta: Tú de ti, y a mí de tu carne des-almada;
¡Transmigra!
O déjame mutar, devorándome el Terror.
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