GAVASE

OVILLEJOS DE LA MUERTE

Con la esperanza perdida
Y herida,
seguí buscando notoria
victoria,
Y buena dicha yo amé
y hallé.
Con que ganas yo besé
a la que tanto buscaba,
cuando menos lo esperaba
herida victoria hallé.

 

Herida victoria hallé
y porté,
mas no fue fácil empresa
la presa,
al ver en suelo tirado
pecado.
Porque el destino callado
siguió aferrado a la flecha,
honda y sangrante la brecha
porté la presa en pecado.

 

Porté la presa en pecado,
cercado,
en charcos llenos de barro
amarro,
y espinas sus aledaños
de años.
Fui consentido en rebaños
donde los sueños asustan
y los destinos se ajustan;
cercado amarro los años.

 

Cercado amarro los años
con daños,
dejando en malos aliños
mil guiños,
que al ir perdiendo en la fe
sembré.
De un tiempo que ya dejé
colgado del calendario,
siendo mi vida un calvario
con daños guiños sembré.

 

Con daños guiños sembré
¡Soñé!
Al ver que el tiempo teñía
y ardía,
con fuego el viejo disfraz
en paz.
Y sintiéndome incapaz
de alejar tal hermosura;
fue tras de ella mi locura
y soñé que ardía en paz.

 

GAVASE
(foto de la red)