En ésta noche larga y fría, nada a mi lado
escribiendo congelado, espectro me porfía
recuerdo con melancolía desconsolado.
Mis momentos pasados hoy siento que moría.
Aquellos largos paseos pasean mi mente,
aquel desolado parque es aún más ahora,
hoy en día olvidado todo no me es sufriente
en corazón apagado hay angustia opresora.
Con este pequeño poema como promesa
te diré, con delicadeza sin gana a herirte,
pero, desde que fuiste prefiero la oscura huesa
no he levantado cabeza, es tremendo decirte.
Ahora está lloviendo se oye la gota gruesa
nada escribiendo, deseo tenerte, en mí asirte.
El señor de los fierros
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Cada día al levantarme veo un hueco a mi lado veo su foto en la mesa veo mi amor terminado…