Jose Arcadio Libertad

TENGO UNA SIRENA EN EL OÍDO...

Tengo una sirena en el oído…
y en el pecho.
Y soy feliz
contando sus cabellos negros
para adornar mi verso
siguiendo al faro ondulante de su cuerpo.
El eco de su voz sirena
arrulla las palmeras
y besa la luna con tintes violetas
y el caracol en el cuenco de sus manos
me regala esta brisa de otoño…
para empujar mi barco.
Y me pierdo en el mar
profundo de sus ojos
y vivo en su mirada larga
bailando vallenato lánguido
al son de sus mórbidas caderas.
El tintico de sus andes infinitos
enciende mi latir de cóndor
avistando su estela de sal…
entre las olas.
Y cuento los barcos
y las nubes…
las gaviotas
y los tonos de azul
de sus versos infinitos.
Tengo una sirena en el oído
tic tac y caracola
que maneja mis sueños con su tiempo
Y que dicta estos versos
al son de su gracia natatoria
mientras va diciéndome adiós…
con un manojo de besos.