Francisco Solano F

Veinticinco rosas

Cuantas alegrías vividas,

cuantos sueños forjados,

cuantos años yo contigo,

¡Y tu!, constante a mi lado.

 

Algunos, fríos inviernos,

otoños grises, largas esperas,                                                                                     

profusos, vehementes veranos

tú, renacer de  primaveras

 

Oscuros  días, empañaron nuestro cielo,

 rayos que aturden con su voz,

 más todo, podado a tiempo,

 con la fuerza de los dos

 

Nuestros hijos han crecidos,

¡Recuerdas!, ahh si, angelitos inquietos,

luego de tantos años,

brillan en casa, sus hijos, ¡nuestros nietos!

 

 

Eran aquellos mis días mozos,

miraba yo, ¡laureada moza!,

qué bien te asientan los años amor,

te miro hoy, aún más hermosa.

 

Eras, una chiquilla coqueta, recuerdo,

con tu tierno mirar, te me abalanzas,

del sol recibe el brillo tu cabellera,

vestías de verde cual la esperanza

 

Escribo hoy, a mi gran musa,

mujer,  de  fina escarlata

escribo a ti este verso

en honor a nuestras bodas de plata.

 

Eres tú, lo mejor de mi vida,

eres tú, florear del alba,

eres tú, la inspiración de mis versos,

versos que nacen del alma.

 

Hoy como antes nunca,

besar tus labios, he anhelado,

ofrendarte veinticinco rosas,

una, por cada año a mí lado