Aarón Araiza

RAYOS

Encontré un paisaje hermoso en el cuerpo, 

el secreto que guardan las horas, 

desnudo y sin aliento, 

entre arrugas, que fueron testigos de grandes obras.

 

Con un payaso sin un gramo de gracia,

sin mago que creara ilusiones, ni flotara a la imaginación,

en una carpa polvorienta llena de malicia, 

en las llenuras de alegría y decepción.

 

Solo el color marino de los ojos de aquél,

que llego tarde al reparto de sonrisas,

las cuales no puede ni el mismo entender, 

la razón del fracaso y sus desdichas.

 

Es así como voló y encontró aquél gorrión, 

buscando en su camino el calor, 

de quien en su mano cuidara de el por medio de una canción.

y volverá al vuelo de la vida y su esplendor.

 UN AMICO