luismaria

El país del desespero

Este país que habito desolado,

donde los perros se comen las longanizas

con que pretenden algunos sean atados.

Estos yugos fingidos mueven a risa


y asombro y pavor a los foráneos.

Aquí fue la patria de la picaresca

y el solar primigenio del Dios-Caco.

Hoy por hoy, no tienen ausencias


ni la una ni el otro, ambos vigentes,

y actualizados con los tiempos.

No temas los envites de los jueces,


que todo se vuelve huero,

si coges y sales corriendo

regando bien los dineros.


Ya lo dijo don Francisco:

¡Es poderoso el caballero!