Tómame tan despacio, Que... ME DUELA EL DESEO!
Sécame entre tus labios,
Para así humedecerlos.
Vuelve a mi luego, otra vez, y otra, interminables veces
Vacíame! Lléname! Envísteme en tu furia, Y:
Luego clava tu serenidad mezclando tu humedad y la mía
Que la espuma nos entrelace para siempre,
Por un breve instante de esta vida ...
Con mis manos te conduciré allí... tu hermoso rostro,
Justo en el lugar de mi placer,
Sofocando tus gemidos para despertar así los míos.
Te encadenare luego a mi cuerpo, Y te pediré más...
Y al pedírtelo, Perderás totalmente tus sentidos.
Te recompensare bebe... Lo sabes!
Por eso aceptas con gusto tu castigo...
Más luego, Cuando sobreviene un entretiempo de calma:
Mis poemas se vuelven viento:
Y el viento los regresa en Palabras...
Y yo vivo de esas palabras, Porque mi alma, es mi voz,
Y con palabras expreso, Lo que pido...Lo que doy .
Mis palabras se vuelven canciones!
El viento, Les pone Música.
Música que se entremezcla, Con rimas y desarrimos
Sonidos que dicen mucho, Aun aquello, que no me animo!
Animarme a ser poemas y hacerlos Música... Y:
Convertirlos en canciones...
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