Raúl Daniel

El Río De Tu Alma

Navegan palabras las aguas inquietas de tu alma...

el río crecido de tus añoranzas...

tímidos reclamos... tus calladas ansias.

 

Navegan las letras como camalotes

trenzados y esclavos de vientos, corrientes

y su propia esencia.

 

No fuiste la estrella que Dios colocara

como advertencia... no fuiste cometa...

pero fuiste aldaba golpeando mil puertas.

 

El río te trae las canciones viejas,

el río no sabe que te causa pena...

pues el canto es llanto de alguien que se queja.

 

Tu mojas tus piernas en el agua fresca

del río de tu alma...

pero el río trae ecos de otras tierras.

 

Ya moja la luna tu ensueño de pájaro,

y, en tu travesura, te vas río abajo...

hacia lo imposible...

buscando trabajo.

 

Sueñas con un tango... con una guarania,

pero la gran urbe se traga tu esfuerzo,

te corrompe y daña...

¿Tú no sabes, hijo, que tienes trabajo?,

tu trabajo es éste: Soñar navegando,

bogar por el río exquisito de tu alma

buscando esas frases conque embelesarnos...

 

Vuelve a tu provincia y dime un poema...

te estoy esperando.

 

Regresa a mi lado y dime esos versos

que hiciste a tu novia,

no recuerdo cuando...

 

Yo soy esa tierra que templó tu canto,

yo tengo las costas de ese río largo

que tú amas tanto.

 

Camina mis calles... recorre mis campos,

duérmete soñando al pie de mis mangos.

 

Vuelve con tus versos... tocarán campanas

cuando tú regreses... aquí te extrañamos.

 

Vuelve a la naciente del río de tu alma.