Enrique del Nilo

NI CENZONTLE... NI ZOPILOTE

Hay momentos que me pregunto a mi mismo

que demonios es lo que escribo,

nunca estudié para esto

no tengo buena ortografía

y las reglas de la aritmética

no las uso ni para taburete

 

No se me tenga por irrespetuoso

simplemente es una rebelde pluma

que desbocado se lanza

a cabalgar por la cuartilla

llevando entre sus patas

los gritos de mi corazón

que fluyen del manantial

de mi impotencia

ante el sufrimiento de mi pueblo

al que pertenezco

y del cual provengo

 

El espíritu indómito de mi pluma

se resiste a las bridas

de la métrica

de la musicalidad

y tantas otras cuerdas

que atan la literatura

en un redil

de asonancias

y medidas

 

Quien pretenda

aprender sobre poesía

ruégole no me lea

vaya a la búsqueda

de los guardianes de la estética

que se jactan de poseer

las llaves de las escuelas

literarias de la historia

 

Quien tenga la desventura

de encontrarse con mis letras

no se ofenda

si se encuentra reflejada

en las sombras

que deambulan en las mismas

 

Al no ser docto

en el arte de la literatura

solo pretendo con mi canto

mi corazón desahogar

y a los cuatro vientos gritar

la impotencia que se acumula

al ver a mi pueblo llorar

por la bota del poder

mientras él le lame las suelas

 

Admiro a quien hace florecer el arte

y me deleito en su lectura

no me detengo a incomodar

a quien se esfuerza por hacerlo

pero afilo mi lengua y mi pluma

cuando un zopilote

presumiendo frac

humilla a un canario

por no parecerle

el ritmo o estilo

de su cantar

 

En lo personal

no me considero un cenzontle

de divino cantar

mas tampoco un zopilote

que tras más caras me oculto

para vi veneno derramar

soy un loco bajito

que al mundo da la cara

cuando es la hora de cantar

 

A los treinta lectores

que en promedio me visitan

les agradezco

y espero

un día no decepcionarlos

a ellos les dejo

mi perpetuo abrazo

a ellas

un ramillete de besos