Lina María

LA DESESPERANZA ES SUICIDIO

LA DESESPERANZA ES SUICIDIO

Ella tenía la mirada perdida y el pensamiento lleno de confusión porque en sus manos tenía el resultado de un examen médico que no podía aceptar; estaba sola, ya se había acostumbrado a la ausencia de sus hijas.  Miraba a todos lados preguntándose si alguien le podía ayudar, porque según el médico, tenía cáncer en el cerebro y ya había invadido gran parte de su cuerpo.  Ella recordó ese instante en que de manera fría como acostumbrado a ver heridos, enfermos, personas agonizantes, ese hombre no le dio la menor esperanza…. Y se lo creyó…. Tanto que se dejó morir, no habló con nadie del asunto, es más, se alejó de todos, hasta de sus hijas que no sabían su situación; se hundió en el abismo de la depresión y no buscó ni aceptó ayuda.  Quienes la conocían extrañaban su pasear por el barrio cantando canciones y siempre sonriente… se dejó morir… se dio por vencida… no quiso vivir.   Silenciosamente se fue del barrio, supuestamente a una zona de mejor estrato y allá la veían diferente, la trataban diferente, la ignoraban,  ella más se apartaba y lloraba hasta que un día su alma, espíritu y cuerpo se dieron por vencidos, fue difícil para todos  verla en el hospital con un rostro de muerte que no podían olvidar.  Sus hijas lloraban sin entender la razón por la cual su mamá no les decía la verdad.  Pasó poco tiempo para que se fuera… para siempre y nadie pudo contener el llanto del adiós,  su libro llegó al final cuyas páginas marchitas ya nadie leerá.

 

 

Pero la idea de esto es aprender que el silencio y la desesperanza matan más rápido que cualquier mal, el aislarse es suicidio, el silencio es ahogo y por qué no luchar?, por qué darse por vencido? Por qué morir en vida, si hasta el último suspiro el aferrarse a la vida debería ser el ideal; claro está que todos no pensamos igual.  Y tú qué crees que sería lo mejor?