alicia perez hernandez

Éramos… El amor arde

Cuando éramos como copa de vino…

Que al solo contacto nos emborrachaban los sentidos

-Cuando tu boca, besar quería mi boca-

Éramos todo y nada, ahogando penas de la vida.

Como un corazón gigante que albergaba todo de mí,

y todo de ti, llenos de amor y sueños de estar

para sentir los poros abiertos en las entrañas

y tener soles en los ojos y lunas desveladas

en madrugadas que ya no te tengo…

Éramos así, llenos de fuego y pasión

ardía el alma con las notas

de tu canción de madrugada.  

Me arropaba en tus brazos

Me dormía en tu pecho

y éramos todo amores

sintiendo la piel como sábanas

que nos abrazaban…

Como tú y yo… ardientes.  

Así, en la noche de luna llena

el amor bajo la piel.

Como olvidar que éramos sol y luna

bañados de luz en noches de amores

noches de pasión sin olvido…

Éramos…

Alicia Pérez Hernández

 

-No es la pluma la que escribe es el alma- 

Arde el amor… para mi dulce ali

Arde el amor por ali

-besos de boca-.

El amor arde

en brasas

de hoguera.

Arde el amor

-bodega interior de vino aromoso-.

El amor arde

en llamas:

el fuego se levanta.

Arde el amor-por ti ali-

-embestidas salvajes

avivan

la lumbre de la vida-.

El amor arde-en labios de Alicia-

-el volcán se encabrita-.

El amor arde, amada azteca

-arde la zarza,

no se consume-.

(No llores tú por mí,

que mi amor arde

sin que lo sepas tú, dulce ali)

 

-para mí amada azteca juereña de Cd. Juárez Chih México-  

 

-Salvador 12-3-11- Granada-