Luis G Rebolledo

TRAS UN MUNDO DE LOCURA

         

     Soledad tu que llegaste sin avisar al parque de la esquina, por donde me encontraste?  Y con tu libreta que guarda todas tus anotaciones  entre tantas líneas acabadas por el vago tiempo, que no deja si no huellas, solo te quedan ilusiones y  fantasías que van como vagando en los suburbios y galerías de la muerte de un lado a otro.

 

     Al comentar entre dicho y diren que solo vives ´para él, porque su ausencia no calma la sed que rebosa el vaso de agua. Y vas vociferando de aquel amor vacío que cubre una cruda realidad vivida día a día.

 

     Como es que te han quitado todo y no puedes regresar a casa, solo una insensata maleta te hace compañía, cuando te devuelves siempre al mismo lugar para degustar aquel banquete que sacas de la alforja que alimentas la pasión desmedida si sabes que no va a regresar nuevamente  a ti.

 

     En tan perturbados  pensamientos has de buscar la razón de la existencia,  en un momento se te ve lucida y al otro te sumerges en un mar de esperanzas,  sin  darte cuenta que todo se ha perdido, por que guardas tantos piricuetos.

 

     En celacion describes la ruta muy elegantemente con tus trajes de  mártir, y luego te marchas sin una sola palabra  que revele la agonía que arropa tus pasos  sigilosos.   

 

Luigy