David Enrique Gómez Cáceres

BUSCÁNDOTE

 

Buscándote me descubrí, ¡y de qué manera!

supe que guardaba una espera

que aun rudo, relumbro amaneceres

que aun duro, padezco mis pesares.

 

Descubriéndote encontré

donde había soñado amanecer mis días

lo que había creído una utopía o un engaño

donde la vida sonríe y llora, plácidamente.

 

Porque no concibo un lance más oportuno

ahora que río y callo, eres la razón 

y el motivo de todo esto que me inunda

al encontrarte en mis pupilas, hallo

que te amo con el alma y los besos prendidos

al contorno de tus labios.

 

Por: David Caceres

       Managua, Nicaragua.