Al mirarte tú que a veces eres calma y otra tempestad, serenas mi alma, enamoras mi soledad, tú que abres mis sentidos, concilias mi libertad, sentada en esta roca te escucho, deseando poderme escapar, besar la sal en mis labios, sentir la gota rodando, mi vida por contemplar….
Ese tiempo tan presente, obsoleto y agolpado, se diluye sí, si te siento, si te pienso, si te amo, pero presiento este momento en el que tú eres mi amo y yo la dueña del encuentro entre tus olas y mi espacio, tan inmenso y admirado, que soy capaz de alcanzar el cielo y acariciar el océano…
Y en este lugar no intento avanzar, solo sentirme llena de paz, dejar a un lado los miedos, locuras y soledad, sé que me escuchas, tus olas me contestan sin más, incertidumbres que se disuelven porque no hay día ni noche, tan solo sentimientos en este instante, en este deseo…
Necesitándote y rechazándote, anhelándote y buscándote, aquí no importa el destino, sola contigo, abro el camino de una bella poesía de sentirte mío, porque nadie impide sentir un recuerdo perdido…
Y si esas dulces contradicciones, rozan las obsesiones, aferrare mi tiempo, encontrare en este momento una mágica OLA DE SUEÑOS…