Oceánide♡

Querido Papá...

Siendo pequeña,

nada entendía.

 

Necesite crecer

para comprender

que te ausentarías,

para toda la vida.

 

Recuerdo haberte visto,

solo, elegante y dormido,

y en el sueño más profundo

te encontrabas sumido.

 

 Nadie comprendía

mis noches eternas de lágrimas,

con un por qué sin respuesta,

íntegramente desanimada.

 

Hoy llevo la cicatriz

ya casi cerrada.

Estoy a la espera del día

en que el brillo de tus ojos

quite la cruz de mi espalda.