RUBEN BUELVAS

MARI

Nunca he visto tu cara ni he escuchado tu voz

Pero te pinto muy dulce entre pinceles dorados

Y plasmo en el fresco  lienzo una cándida belleza

Una sonrisa muy tierna con pelos ensortijados

 

Eres la luz de tu hogar la hija del corazón

La flor que adorno el edén y notas para el cantor.

Eres como roca dulce de donde el agua salió

Para calmar al sediento  y a La tierra del sol

 

Mari Helena suena a rima a ecos y melodías

A cantos de la sabana en las noches de alegría

Cuando la luna nos brinda su luz en fiel armonía

A son de poro y tambora con las velas encendidas

 

Inspiración del poeta niña de ojitos encantados  

La amiga que todos quieren siempre tener a su lado

Alegría de las reuniones que de estudiante han formado

Eres como el aire fresco que todos necesitamos