ivan rueda

PERDÓNAME, VIEJO AMOR.

 

Perdóname, viejo amor,

que te escriba estos versos

que son como las horas

perdidas en el tiempo,

que son como las hojas

en manos de los vientos,

que son como las sombras

o cenizas del recuerdo.

Perdóname si no te espero

cada tarde a las cuatro,

si no acudo a nuestra cita

con el mar y los astros,

perdóname si mis lágrimas

llevan sal de otro nombre,

perdóname si mi boca

sabe a miel de otros labios.

Perdóname, viejo amor,

que tu luz no me toque,

que tu voz no me alcance,

que pisase tu flor,

que matase a tu ángel,

que cerrase la puerta

y tirase las llaves.

Perdóname, viejo amor,

que tus cartas no guarde,

que te oculte en mi olvido,

que te entierre en mi sangre,

perdóname si tu piel he vendido,

si he quemado tus naves,

si hace tiempo he perdido

la costumbre de amarte.

Perdóname si el camino

no fue a ninguna parte,

perdóname que en mi maleta

no quepa tu equipaje,

perdóname, viejo amor

que te haya puesto el traje

que se pone a los muertos

en su postrero viaje.

Perdóname, viejo amor,

por olvidarme de ti,

por mi nuevo amor

y ser de nuevo feliz.