Humberto Galvan Calvillo

Tristezas


         Tristezas...


¿Que es lo que os ha cegado?
para no ved lo que os ofrezco
vuestra indiferencia no merezco
pués sabéis que siempre os he amado.
 
No digáis que es mentira
porque mi corazón es quién lo siente
y sabéis que a él no se le miente
que aunque no puede ver... suspira.
 
No debéis envolved con enredos
ni con vuestras mentiras piadosas
es mejor decid las cosas
con verdad y sin miramientos.
 
Si la verdad es no darme vuestro corazón
entonceis presurosa debéis deciros
no engañéis con falsos suspiros
ni alimenteis con falsedad mi pasión.
 
No deseo que veais mi dolor
ni convenceros de lo que siento
es infinito y puro mi sentimiento
así es lo que siento por vos.
 
Jamás me hubiese imaginado
que a vuestros pies haya caido
y que sin pena dejéis al olvido
lo que sin miramientos os había dado.
 
¿No os duele lo que véis en mí?
Acaso vuestro corazón es de granito?
si vuestro desprecio ha de ser infinito
entoncéis no deseo seguir.

Humberto Galván Calvillo.
El dulce sabor del desprecio