Murialdo Chicaiza

La rana y el sapo

 

La rana salta al charco

y canta su gutural canto

a la espera de algún sapo

la bese sin reparos

pues, de pronto, así sepa

si es una verde princesa.

 

Pues no puede creer que sólo

los sapos estèn encantados

quien sabe él se convierta

en príncipe y ella en princesa.