L lantos de los espíritus hechizados por el alba
A soman desde el fondo del alma en pétalos aguamarinas.
G emas que también reflejan la alegría y la emoción,
R osas cristalinas nadando en el jardín de la ternura;
I mpiden que se rompa el corazón de tanto amar.
M aravillosos bálsamos contra el desamor y la tristeza.
A rroyos que se convierten en cascadas atravesando valles,
S altando como la lluvia por los tejados, los asfaltos,
M ontañas, laderas y paraísos lejanos de la memoria.
A londras en suave vuelo a ras de piel.
G racias sean dadas a estas perlas de pureza y transparencia,
I nundan los iris cansados de nubes fantasmas,
C aen arrastrando las hojas secas del alma
A yudando a tejer nuevas ilusiones.
S anadoras, misteriosas y mágicas lágrimas.