Rocío V-P.

A LOS POETAS QUE HAN PARTIDO II (Redondillas)

 

AMADO NERVO (1870-1919)

Estrofas inspiradas en, I “Me Besaba Mucho”, II “Mi Secreto”,  III “Perlas Negras VIII\",  IV “En Paz”. 

 

I

 

Y al que sus besos presos

 

ella diese sin lucidez

 

presiente, en su frío jaez,

 

adiós de eco eterno.

 

 

 

II

 

De utopía, camelado

 

en ataúd alma asió

 

ni en años de aflicción

 

su fruición ha olvidado.

 

 

 

III

 

Celdillas de su acento

 

anegando la emoción

 

de un amor que naufragó

 

hundiendo a destiempo.

 

 

 

IV

 

Las manecillas avisan

 

el balance cosechado

 

sin lamentos, relajado,

 

¡estamos a mano, Vida!

 

 

 

SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ ( 1651- 1695)

Un tributo más a Sor Juana, desde un punto de vista distinto.

 

De companía, su dama

y la virreina aprobó

crisol de oro rebosó

con su tinta ensoñada.

 

Ingenio al adjetivar

los sustantivos y verbos

inteligente acervo

al buen barroco apreciar.

 

Gustaba experimentar,

sacros y profanos versos

teología y trebejos

ciencia y ritmo rastrear.

 

Comedia, lírica, drama

su péndola primor parió

numen la inmortalizó,

¡Décima Musa, Sor Juana!

 

 

 

 CARMEN MONDRAGÓN/ Nahui Ollin (1893- 1978)

Sus obras fueron el medio idóneo para expresar sus vigorosas pasiones, sus tumultuosas emociones, sus inquietudes filosóficas y poéticas”.

 

Para morir hay que nacer,

cenizas de fénix yertas

impresionante belleza

al fin no ha de fenecer.

 

Vivir, volar, necesario

en México conservador

su libertad, ya sin pudor

alarmó al Porfiriato.

 

Y sus pintores, amores

existencia de expresión

en sus poemas atavió

dinámica, sus primores.

 

De mar pupilas, nombradas

piélagos y oleajes

tanta cultura, pasajes

¡sensual pasión derramada!

 

 

MANUEL ACUÑA (1849-1873)

Corta y fructífera vida de letras. Estrofas inspiradas en “Nocturno”.

 

Los altares, tus quimeras

de blanco a la cruz llevar

eternidad atravezar

majos cielos con tu reina.

 

En floreadas praderas

bendita agua vertiste

así, tu alma cediste

sin reparo, cual poeta.

 

Granas mañanas, heridas

en el alma bien clavadas

con dolor, sin esperanza

diste adiós a la vida.

 

Y en tu tragedia ahogó

tanta ofrenda fallida

en  mocedad abatida

¡un gran trovador pereció!

 

 

 

Copyright© 2013 Rocío Vega-Ponce