Enrique del Nilo

CONFESIÓN FÁCTICA

Perdoneme señor juez

pero aún con la soga al cuello

o con el culo empinado

yo seguiré opinando

que este mundo fuera mejor

si seres como usted y su señor

se hubiesen muerto chiquitos

 

Entre seguirle atorando

piedritas al tecomate

que ya rato topo al buche

de seguir esperando

que los de arriba se llenen

pa que caigan migajitas

 

Me fui envalentonando

y le atoré a subir pa riba

si no es por la cachimba

del maldito chucho’e finca

llámele usted alguacil

o como quiera gendarme

yo le llamaré polvo perdido

porque olvidó bajo el uniforme

hasta la madre que lo ha parido

 

Ya le arañaba las barbas

al chele ojos de gargajo

ese que de ver pa bajo

le da mareo y se caga

ese que no va al monte

porque le teme a las cabras

 

¡Que si me va a condenar!

si yo nací condenado

que peor pena me va poner

que vivir de arrimado

comer poco y de fiado

y cuando no hay de robado

 

Pero antes que se retire

y me deje aquí zampado

deme un placer chiquito

que horita se me ha antojado

quiero que me respire

un pedo que me he tirado

y que le diga al maldito

patrón que le ha mandado

que los huevos no me los quita

no me los dieron fiados

y que Dios no lo permita

no lo vea resucitado

pues me acordaré de todito

y él será el condenado

 

Hoy vaya y muévale el rabo

dele cuenta que la orden

la cumplió al pie de la letra

porque vino y encarceló

a quien le rompió a él la jeta

porque el no tuvo el valor

de cobrar por él la afrenta

 

Le dejo pulgas y liendres

pa que se cobre la deuda

me llevo mi dignidad

de esa no podrá despojarme