Sabas

Perla del tesoro

El día pende de los hilos de un rayo, como un señor sin norte, un espiral de moscas juegan a la ronda entre los huesos de un ciervo, y la pregunta emana del agua como cascada agujereada. ¿Qué eres tu, cariño de mi cariño padre?, acaso una hija del viento o una oleada de pájaros, o serás mariposa mía, madera virgen de mi guitarra?, yo se que el sol amanece, cuando tus ojos despiertan, que el río corre y estrella la mar, la endulza cuando abrazas, se que no hay panal de miel sin el beso de tus labios, ni primavera sin tu piel, ni flores sin tu aroma inundando la caja de las almas. Yo se que tu eres radio por luz mas luz al infinito, yo se que tu eres perfecta y no lo eres, que a veces mutas y otras viajas, que a veces me pierdo en tu sonrisa de cielo, que a veces te bebo, que a veces me muero. Yo se que una lagrima tuya es una lagrima mía, y que duele todo lo que te sofoca en tu pecho. Será dulzura, será, si, claro que si, absolutamente, estoy convencido que si hay algo que eres, es amor irrefutable.