Peregrina

DOMINGO DE AMOR


Una tarde veraniega

Se acercó y le dijo adiós

Sin tomar para nada en cuenta

Lo que un latido le dictó.

 

Sin volver su pensamiento

A lo que un domingo aconteció

Día festivo y de alborozo

Que en sus brazos la tomó.

 

Vehemente ese momento

El arrebato obnubiló

Cuando ella sin menoscabo

A su amor se abandonó.

 

Una tarde veraniega

Se alejó y nunca volvió

Ignorando sin resquicio

Al pequeño que engendró.