Hugo Blair M.

A PORFIRIO BARBA JACOB

 

Fue un peregrino entre odas y nostalgias,

dio batallas entre rugientes vientos

ceñidos a su corazón desecho,

con embrujo, con pasión y con gracia.

 

Vibro por entre ocultos sentimientos

bordando entre los líquenes sus penas,

dejándonos sus reflejos, sus huellas

de su delirante vida... un sendero.

 

Llegó donde enmudecen los suspiros

irradiando entre céfiros sus versos.

Los embrujos que vibran en silencio.

 

Cabalgó sus angustias sin apero,

embebido de tinieblas, al fin

hubo un silencio de paz en su lecho.