Te tengo en mi recuerdo, como imagen obsesiva
Basto un segundo, solo un parpadeo fugaz
Para robar tu semblante y enterrarlo en mi memoria
En aquel museo de musas que forme en mi mente
Fue a través de un cristal cotidiano en avance que te vi
Un aparador perfecto, puesto a tu belleza seguramente
Estabas absorta en tu actividad, en un hermoso espacio
Ese mismo que genera tu apariencia que es altiva.
Unos audífonos puestos me sugieren que oyes música
¿No lose? me quedo con la duda, claro no es la única
¿Qué haces? ¿A qué te dedicas? ¿Cómo te llamas?
Entre muchas otras, gustoso escucharía la respuesta
Al fin decidiste voltear, quizá fue una mirada esquiva
Disimulada, orientada cerca de mi o mera casualidad
Me fascino tu expresión, dejaste mi vista encantada
Mi pensamiento lleno de expresión pasiva y encerrada
Camino a mi destino el autobús avanza lentamente
Dejando tu recuerdo en mi letra fluida e inspirada
Olvidando las acciones y esfumando las palabras
Me despido con la tinta plasmada que dibuja tu mirada
El Iletrado de la Villa