Antonio Fernández López

CONFORME

 

         Esta misma mañana, no es preciso ir más lejos,

Asomado a la luz con el sudor al cuello

De un Agosto furtivo

He gozado un encuentro de fluidos

Que comenzó en los labios y reptó entre los dientes hasta alcanzar el núcleo.

Apenas un espasmo como aluvión de espuma

Desde el mar de la vida

Dirigido con sus solas expensas hasta un lugar de origen

En el que se dibuja una mezcla incomparable

De  textura, fuerza, espalda

Cañonazo de piel y de suspiro

con  encuentro de prado y estampa de armonía.

 

Esta misma mañana, no sé si de improviso,

Me sorprendo mirando dulcemente tu cuerpo peregrino.

Mi mano, sin dudarlo,  se apodera decidida  de tu espalda

Aunque es la boca quien sella, quien certifica,

Quien elimina  dudas y afirma contundente

Que existe el equilibrio.

Que ha bajado el espacio hasta este punto justo

Que nos funde y que nos reconoce

Como seres conformemente unidos

 que han logrado la paz

En esta eternidad de estricta coyuntura,

¡Apenas un instante que justifica un universo!.

 

Esta misma mañana, no sé si volverás

Si volveremos, si tus ojos, si mi mano,

Si nuestras bocas imantadas repetirán el beso,

No sé si otro momento conformará de nuevo esta unidad indisoluble

Pero cómo me salvo de esta fuerza

De habernos confundido

 y firmar en el tiempo  el visto bueno.