¡Oye!, levántate, ¿Qué no ves que te están dando las doce y no sabes ni como te llamas?
En que momento empezaste a caer en este dolor, hace mas de cuatro días que no te veo la cara y para acabarla de amolar ayer te pusiste la borrachera de tu vida e hiciste el peor oso, algo que jamás te había pasado.
No se como explicarte esto, pero la verdad es que tu y yo ya no podemos seguir viviendo juntos en este lugar y…
Lo cierto es que me voy por que ya no puedo esperar a que cambies tu forma de ser.
Empezaste con una pequeña crisis de rencor y quise estar contigo, pero solo me miraste mal y no dejaste que me acercara a ti.
Después cuando comenzaste a pelear contigo mismo, empezaste a dejar la tolerancia a un lado y comenzaste a gritar y a soltar a cada momento, lagrimas, las que me impulsaron a alejarme con mas fuerzas de ti.
hace algunos días que definitivamente no sé nada, no hemos compartido ni un solo momento, ya no me veo en tu rostro cuando te miras en el espejo y ahora siento que ni me recuerdas, me canso de esperar y tu ni siquiera quieres saber de mi, intentare verme en tu rostro una vez mas, pero la verdad es que comienzo a temer que ya no sabes quien soy.
Aunque hemos compartido tanto tiempo juntos siento que eres para mi un extraño y que ya no tengo nada que hacer a tu lado.
Creo que es hora de marcharme, de abandonar tus labios, tus ojos, que en cada momento de mi vida, que en cada momento fueron para mi el sol que iluminaba mis días.
Aunque pienses que ya no te hago falta te digo ahora que no me voy de tu vida yo sola por que me llevo tu sonrisa, tus ganas de reír, tu afán por superarte, tu locura.
Me hubiera gustado estar contigo mas tiempo, para ser sincera esperaba que fuéramos realmente viejos para cuando tuviera que apartarme de ti, pero ahora que has conocido a ese nuevo amigo llamado depresión no puedo decir que tengo un lugar importante en tu vida.
Adiós… no hay mas que decir.
ATTE
Tu inseparable amiga:
FELICIDAD.