Alexander Chinaski

Si puediera

Si pudiera derretir, los gélidos bloques de hielo
Que en el templo del séptimo
Mantienen presa a mi alma

Si al menos pudiera, descubrir el tupido velo
Que con símbolos viejos y nuevos
Es a la vez oxígeno y asma

Si pudiera ser, ese insaciable apetito
Del loco inventor que obtiene el modo
de convertir el hierro en oro

Si al menos pudiera, tirar del finísimo hilo
Que al cielo, como una cometa
Sobre nuestras cabezas, mantiene sujeto a la tierra

Si pudiera verter, la roja y viva sangre,
Que como si a través de un invernal manto
Se expande, y dibuja el principio y fin de la masacre

Si al menos pudiera, prender la primera chispa,
Que a modo de lumbre, en la caverna de los hombres
da fuego, como se corre por el folio la tinta

Solo entonces, creería;
Pero como la verdadera virtud
Consiste en ausentarse de la idea
De que exista tal virtud,
Me protejo con un corazón sin dueño
Para que mi mano, empuñe con firmeza
La pesada espada de los sueños.