El escribir sobre el paso de mis días se había detenido,
pues la dulzura hermosa de la alegría habría acariciado mi vida,
de tal manera que el convertirme en el mejor, a un sueño firme
había trascendido, sobresaliendo y siendo fiel siempre a ti...
No puedo evitar que el viento dentro de mi ser se torne salvaje
azotando con coraje el sentir de mi corazón... Lastimando la razón.
Escribo recordando tus besos, sintiendo tu cuerpo junto a mi,
la forma en que amorosa te protegías entre mi pecho,
la manera en que mis manos recorrían cada parte de ti,
el sentir armonioso y el aroma de tus dulces sollozos,
se han tornado en tan solo hermosos recuerdos...
Sueños... Ilusiones... O tan solo un simple alucinar...
Alucinante estadía maravillado de tu ser... Bendita mujer,
que lograste robar de mi corazón la calma,
sacudiendo asta la mas intima parte de mi ser...
Perderte nunca fue dado a mi mente,
lejos lo veía del sendero que tomaba mi vida,
pero las circunstancias son crueles y la realidad,
mediocridad y penumbras plenas, es la mía convertida...