Esto no cuesta.
No cuesta confesarme si es por ti,
confesar el hechizo al cual me sometes,
tu embrujo es tan poderoso que no despierto,
¿cómo poder exterminar este sentimiento tan aferrado a mi?,
es como una plaga que quiere mutar hasta ser incontrolable,
saber que representas una fantasía,
que me haces volar con tu sonrisa,
divagas en mi mente como la muza en todo su furor,
me haces escribir hasta lo que nunca he escrito...
Pero degollaste todo en mi ,
mis pensamientos y sentidos agonizan sin vida alguna y sin probabilidades de existencia,
mueren
lloro porque todos caen llamándome y diciendo:
¿porqué?,
¿acaso no hicimos lo suficiente para vivir?
La muerte que los acompaña me da a entender que no es justo,
porque hacen parte de mi,
me llevan y me arrastran,
me doy cuenta que agonizo mirando el puñal que atraviesa mi corazón,
allí donde ellos salen sin vida alguna mirandola a ella,
su verdugo
¡Malditos los sentimientos que me segan y me hacen débil!