julio de guernica

Cada noche...

Cada noche que te sueño,

cada día al despertarme,

la piel se me vuelve llama,

y se me incendia la carne,

por esta pasión inmensa

que explota en mi alma al mirarte...

Cada estrella que aparece

cuando se muere la tarde,

con letras de luz dorada

escribe tus iniciales,

y hace estallar el silencio,

tan sólo para nombrarte...

Cuando las flores de otoño

vierten esencias fragantes,

y las gotas de rocío

besan sus pétalos suaves;

yo sólo aspiro tu aroma

que me perfuma la sangre...

Cuando entrecierro los ojos,

veo en el cielo tu imagen,

me hierven de mil caricias

las manos por extrañarte,

y se hacen fuego en mis labios

los besos que sueño darte...

Porque rebosa mi mente,

la locura que me invade,

el corazón es pequeño

para una pasión tan grande,

y detiene su latido

si junto al tuyo no late;

porque conoce que existe,

nada más para adorarte...