Lorena Rioseco Palacios

DE APEGOS Y DE ABANDONOS...

Sufro,

trato de respirar,

necesito que entre aire a raudales a mis Pulmones,

para que se expandan y se confundan con los Cerros míticos

y

florecientes de cascadas de cobre ,

ansío que mi Pecho trasmute al algodón,

como la crisálida a la mariposa,

que mis huesos se conviertan en arenilla de sal marina molida.

Sólo deseo que un bisturí raje mi carne humillada

y

los duendes dejen caer como una piñata golpeada,

luces ,

colores

y

caramelos de Paz.

Incontables espinas ,

arbustos malditos ,

martillean

y

martillean

sin cansarse hasta formar un agujero de profundidad insondable por donde se Filtran todos los dolores del mundo,

con sus horrores y agonías ,

siento un ejercito de arcadas al observarlo tras el velo obligando a contenerlo

y

hacerlo mío,rajando el jergón que cubre mis entrañas

y

las conviertes en un charqui de puras venas y arterias mancilladas ....


Mi Corazón deja de latir ,

mi Cerebro de Imaginar,

mi Espíritu de Creer,

mientras al unísono mi Alma se Congela

y

se Embota como Pececillos de colores tras la una vidriera de un acuario olvidado.


Detrás de mi Vista,

Oídos

y

de tu Aroma de Hombre que te hace inconfundible,

veo Perdidas las Dimensiones Físicas ,

me encuentro en el epicentro mismo de mi Locura mas pérfida

que llega gimiendo como animal en celo a los cuatro vientos

¿ A quién le estará regalando su Erotismo, su Sensualidad , sus Palabras llenas de Ingenio , sus Ojos Almendrados, Brillantes y Coquetos, su Sonrisa que derrite y no sólo Seduce?...

¿O simplemente con la inocencia de un escarabajo estará jugando paletas en una Playa imaginaria de arena blanca y Mares rosados?

¿Qué me queda por cavilar? :

Halcón o Roedor ,

Tigre o Cebra ,

Hiena o Carroña ,

o tal vez

un Pez salido del mar , vestido de un Bizarro Terciopelo Amarillo ,

con Zapatos Púrpuras y Sombrero Anaranjado ;

pues a veces la vida nos apremia a enajenarnos para no sentir la Piel enclavada.


El sol se esconde Tímido tras una sólida Nube,

tras un blanco puro que trasluce una Sínica Inocencia ,

la Luna inventa un Eclipse ,

las Rosas se aprietan pétalo a pétalo para no florecer ,

los Ríos se congelan de susto

y

espanto ,


los árboles luchan para no quebrarse ante la fuerza del Viento,


mientras Dios enmudece ...


¿ Quién no teme en la profundidad de su Arcoíris ser Abandonado?...


No hay nada mas mío que mis Fantasmas,


es que al fin y al cabo así somos los Rinocerontes...