Adan Chuck Arriola

PEQUEÑA

Pequeña

  

Nena de mirada dulce

y corazón que prospera,

dame luz de primavera

como sólo el sol produce.

 

Tu nacimiento trajo paz

 y felicidad al mundo;

sosegaste al iracundo

y  dulcificaste al voraz.

 

Hoy tu inocencia angelical

se dispersa entre nosotros                        

y nos haces armoniosos

con tu gracia providencial.

 

La inocencia te recorre

por donde caminas y andas;

y serenidad emanas

a la humanidad de este orbe.

 

Con el canto de estos versos

mi espíritu te reclama

y mi sencillez te aclama,

¡pequeña de mis recuerdos!

 

Adán A.