Maria mateo

Soñé tus sueños.



Anoche dormí tus sueños, 
reposé mi cabeza en tu almohada…
me impregné de ti y soñé tus sueños.

Soñé un camino de palabras
en tierra encantada, 
los arboles de poemas 
y el sol una diadema, 
el viento no era viento 
sino pétalos que acariciaban…
y te rodeaban invitándome a un baile.

Habían gigantes, hadas y enanos por doquier 
la noche no existía 
sólo el amanecer de oro, rojo y purpura.

Anoche soñé tus sueños,
reposé mi cabeza en tu almohada…
y desperté en tierra encantada…
que sueños tan hermosos 
¡son los sueños de mi hijo! 
Quiero volver a vivirlos y soñar sus sueños.