Joseph Mercier García

NO PUEDO DEJAR DE PENSAR EN TI

Nada. Es imposible.

Inlograble. Macabro.

Absurdo. Atroz.

En ocasiones se hace terrible.

En ocasiones, cruel.

Hay ratos que parece fácil,

pero también los hay que se muestra inexorable.

Inexpugnable. Imbatible. Indigesto.

Como una astilla en el zapato

o una piedra en el corazón.

Tampoco sé muy bien por qué opongo resistencia.

Tal vez me dé rabia, impotencia, coraje.

Pero no puedo.

Es absurdamente ilógico,

como una huella que no se quema a fuego.

Extraño, nostálgico, e incluso dramático.

Y por encima de todo, diría que hasta bonito. 

 

No puedo dejar de pensar en ti.