Murialdo Chicaiza

El regreso

Hoy he vuelto tras mis pasos

que me llevaron al mar,

donde una enramada

de gaviotas

cruzó mi garganta.

 

Me pareció que nunca fui,

que estuve mendigando

este ancho Sol del mar

-como ahora, casi muerto-

 

Nadie me reconoció

yo a nadie recordaba.

Solo estuvo a despedirme

la mirada de la nada.

 

Regreso, y debo confesar

que la sal de mi cuerpo

casi se convierte en lágrima.