Sara (Bar literario)

Poema de respuestas mĂșltiples

Probablemente

Mientras te hablaba de mis pesadillas

Tú fracasabas sueños en nuestras miradas;

Nos dibujabas en el amanecer incendiario

De una ceniza a punto de quemarse.

 

Lo que dije era cierto,

cierto como todas las mentiras que improvisé

en las puertas cerradas de una verdad omitida.

 

Cántame de la vez en que perdimos el alma

para no sospechar que esto que vivíamos

era un todo, menos vida  (ocasos de ropa quemada)

 

                                                   (¿Notas que miento?)

 

No, vendimos el tiempo en un escaparate de moda

nos vendimos para ser libres en un manicomio

y dejamos a la razón congelada

en la cláusula instintiva de lo imposible.

 

Imposible que deje de amarte

cuando mis manos

roban letras a un corazón

sufragando su dictadura.

 

Lo que dije era cierto

Mi creación es una patología

Salvando su metástasis

En las muertes que me acarician el suicidio.

 

 

He dejado de contar

He dejado

La inercia no pesa tanto cuando somos más que números

 

 

Qué sé yo de la tristeza

Solo sé que es esto que intenta diluirse y llenarme

En el trasfondo lúdico de mis poesías (no es un juego la caída)