DAMSYD

Razón-Corazón, Corazón-Razón.

 

 

He comprendido que "des-enamorarse" supone un proceso de  razonamiento impuesto al corazón, cosa que por más razonamiento que se haga es  imposible,  y yo  siempre he dicho de mí misma que mí corazón es más fuerte que mí razón, así que  quién termina doblegándose en mí es la razón y no mi corazón que le es fiel al  amor. Deje de perder energías en torturar a mi corazón con mi razón, si me  he de des-enamorar será un proceso que tendrá que darse de una forma natural y  no como una imposición. Por ahora sigo enamorada aunque callada y el amor se  puede guardar en silencio incluso en contra de quién se ama, no pretendo ya  volverme una roca insensible, que la razón haga su parte y mi corazón hará lo  que bien sabe hacer.