Eduardo

DAMA DE DIOS

Envenéname  con tu incertidumbre

Acércame a la gloria hermética

 Hacia el eterno paseo de lo oculto y lo sagrado

Estoy cegado por tu feminidad y pureza

Soy  adicto a las sentencias de tu metamorfosis

La lluvia de la luna…  la haces llorar con tu palabra

Guarda tu sabor en esa palabra

Comienza de una vez por todas

La batalla está muy cerca

Y Dios es el mismo de siempre

Cuando corres verdaderamente te deseo cerca de mi otra vez

Tú unes todos los caminos

Y los haces una nueva cosa

 Todas las redes que hay en ti

Quieren que esperes un poco de fe

 Puedo verla en tus ojos…  si es, es un poco de fe… lejos y fuera

 Tú… esperas muy lejos

Ven… ven a mi ser y vuela

Escucho risas, malévolos orgasmos

 Pueden ocultarlos, pero siempre formarán parte del plan

Di palabras que me inciten a tenerte

 Tu corazón ha terminado con la lluvia

 Tu pecho está hecho de inocente culpa

Pero eres la misma para mí
 El eco termina en la pared y no lo puedo ver

 Sabes que me gusta el fuego… cuando tú eres las brasas.