Después de llegar del trabajo
y de darme una ducha,
me serviste la comida
mirándome con picardía.
Aunque estaba muy cansado
por las labores del día,
casi ni probé bocado
y te abrace enseguida.
Tu cuerpo estaba caliente
y la sangre a mi me hervía,
al ver tu bata de casa
transparente como el día.
Te bese tus labios rojos,
me quite la bata mía
y la tuya con mis manos,
la eche al piso con prisa.
Los platos al suelo fueron
y con ellos mi comida,
porque la mesa fur nuestra cama,
y tu estabas alli servida.
Mis manos te acariciaban,
con furia pero sin prisa,
mientras tus pupilas estaban
desbordantes de alegrías.
Nuestros cuerpos se perdieron
en deliciosas fantasías,
te estaba comiendo toda,
mientras temblabas,mi vida.
Nuestros besos nos quemaban,
corazones que latían,
suspiros que tu exclamabas
y yo que me estremecía.
Ya nadie podría apagarnos,
tus llantos eran melodías,
me pediste ir al cuarto
y te dije ..!si mi vida!.
Seguimos la cabalgata,
entre murmullos y risas,
me dijiste: !estoy cansada!
hemos hecho el amor
como nunca antes lo hacia
y yo entonces te grite......
!TENGO HAMBRE TODAVIA!