mussio

A madrugada entre nos

Cuando la noche cae mi sueño comienza, pero no ese sueño de dormir sino el sueño de imaginar.

 

Cuando la madrugada se levanta despierta mi verdadero yo. A veces lo odio, otras veces solo lo contemplo con envidia....

 

Es triste que muchas veces no pueda expresar mi otro yo de día, pero más triste es que no pueda ver a mi cómplice de noche, me tapa un maldito techo

 

Voy al barranco secreto de mi casa, la llave simplemente apareció en mi llavero, nadie lo sabe, nadie tiene que saberlo. Pero en el barranco hay un lienzo nocturno en el que puedo dibujarme sin prejuicios ni bardales.

 

Mi más grande problema soy yo, porque soy la que me impide demostrar todo lo que vivo, lo que siento, lo que veo, y todo por miedo. Miedo a que me olviden y me dejen de lado, y miedo a parecer tan ridícula como una mochila de barbie.

Bueno ahora me siento, confusa y difusa.

 

Como poder explicarte mi razón de estar acá. Ni yo lo sé, solo sé que aquí no pertenezco, que mi existencia parece ser errónea que el preservativo falló y mi cuerpo también lo hizo. Ahora estoy cansado, aburrido de vivir.
La noche parece haber absorbido el color del día, el gris parece estar de moda ahora, pero yo no. 1:55 p.m. eres traicionero, sí tiempo lo eres. Me desnúdaz y me dejas en el limbo, aún soy un bebe que quiere gatear de vuelta a su vientre.

 

Soy las ganas de vivir y las ganas de morir, soy las ganas de saber que hay después de este festival. Sí así quiero llamarlo, me ofende mucho, pero no quiero caminar de vuelta a lo anterior, no porque no pueda, sino porque no se caminar, vivo gateando en

Esta vida, en este sendero, que poco a poco me va traicionando y poco a poco me enseñó a ir cayendo… y la vulnerabilidad vuelve a relucir.

 

Oh mi vida, porque serás así conmigo, tan cruel y tan dulce. Pones en mi camino el vino y el pan pero me susurras suavemente que el pan tiene un veneno lento, lento y placentero.

¿Morir? Eso ahora ya es un juego, hay suicidas hay asesinos, hay científicos, políticos, pastores...Hay personas. Que vago es todo esto, que falso que...predecible.

 

Yo no lo llamaría morir, lo llamaría libertad, salir de este mundo. Con dolor o sin dolor, pagaré el precio de mi error, vivir en este mundo y querer morir sin haber hecho nada por él.

Pienso y digo, ¿estará el mundo feliz con mi ausencia? O... ¿seré yo feliz sin la ausencia del mundo?

Es difícil pues, imaginar a el mundo sin mí... o yo sin el mundo…
Difuso

 

Mirar...Mirar las estrellas, la luna. Mirar el mar, la arena y el viento mientras uno piensa... ¿Qué pasará conmigo o contigo? Es inevitable el final, eso sí, pero en el camino se ven tantas cosas que uno se horroriza con tan solo pensarlas.
Mirar el pasto, los árboles. Mirar el sol quemando nuestros ojos por su intensidad de palabra.
¿Estas feliz? Quisiera que la respuesta sea afirmativa pero no puedo escapar de la realidad. ¿Por qué no puedo ser aquel salmón? Ese que nada contra la corriente, que se esfuerza por dar la contraria al río de “Don Rutina” y no teme al más bravo clima ni al más feroz oso que lo espera paciente en la roca. ¿Por qué no puedo ser ese salmón libre, al que tanto anhelo llegar?

 

Ese salmón no es libre, y no lo será jamás, es un salmón enjaulado en las garras del mar, el cual lo desgarra como una fiera a su presa, y como dice aquel dicho SÍ NADA DIJISTE CÓMPLICE FUISTE, pues me declaro culpable por mi delito al no salvar a aquel indefenso salmón, pero ahora está muerto, yo lo mate, pues él me dijo LIBRE QUIERO SER.