El Poeta Moderno

Amor adolescente

Si al suene de la música es en ella,
sus labios son instrumentos divinos,
pues en mi oír me fueron ofrecidos
como en la tierra la luz de la estrella.

Hoy en mí aquella belleza centella,
y la dulce cadencia de sus hilos
y sus gestos y su modales finos,
impregnaron en esta mi botella.

Pues mientras por admirar su cabello,
desde la tierra ella y yo desde el cielo,
habrá por siempre un único universo.

Mientras crear una curva en sus labios,
y oír fonemas que hacen hombres sabios,
habrá siempre en ella un misterio extraño.