valentino arrabal

OJOS EN LA PARED

Esos ojos que en la pared me respiran

esta vieja soledad clandestina

que se ahoga timidamente

cuando yo me refugio

sin querer sentirme parte de todo

despuès de mucho mirarte

despuès de mucho quererte.

Mantenerme quieto en el encierro  es mi deseo

pero cuando las paredes se hacen espejos

siento una soledad multiplicada

y contemplarse asì es narcisista,

pero tù sabràs entenderme

que cuando cae el sol la luz no se va del todo

sino que va dejando pequeñas semillas

que van creciendo en el encierro

y que poco a poco las sombras se disiparàn

y que te desbordarà una luz liberadora

apasigunado la inquietud del alma

y sentiras la dicha desbordarse en tu corazòn

queriendo compartirlo con todos

y sòlo entonces

volveràs a conectarte con el todo

y asì sabràs entenderme

cuando al principio te dije:

Esos ojos que en la pared me respiran…